Alianza

El desarrollo de la Cumbre iba en perfecta dirección, algunas de sus invitados de honor tales como Rachel Fitzgerald, Ara Wayne Goldstein o Evaristo Blackwater dieron discursos esperanzadores, fuera en sintonía o discordia con los Seres. La inefable Winry Rockbell, en representación de su jefe Klevelyn Evans, regaló a los asistentes una información valiosa fruto de su investigación en el departamento de Misterios. Todos se quedaron atónitos al escuchar el veredicto sobre el mago de cabellos plateados, Yoifre e incluso del reloj acuñado Bryan.

Pero había alguien en la sala que no escuchaba a la artesana de la misma manera, se trataba de Phentom Dusty, el jefe del departamento de Accidentes y Catástrofes Mágicas, quien asumía durante la Cumbre el puesto de Ministro de Magia en funciones tras la repentina ausencia de la ministra. Phentom esperó a que todos terminasen para pronunciarse, algunos se veían venir algo extraño tras su raro comportamiento en el transcurso de la Cumbre.

Una vez se situó en el hablador del Wizengamot, comenzó a arremeter contra los discursos de los invitados de honor, y mientras todos se quedaban boquiabiertos, el señor Dusty chasqueó los dedos y de los sillones aparentemente embrujados salieron unas cuerdas que ataron de manos y pies a todos los que se encontraban sentados. El temor se apoderó en un primer momento de la sala de juicios.

La cara de Phentom comenzó a deformarse, la poción multijugos se desvanecía, y de repente, la cara de un hombre moreno con pelo morado punkie apareció entre las hombreras del traje del señor Dusty. Era Bryan, quien tras el ritual de resurrección del que hablaba Winry Rockbell y que creía imposible, había asesinado y suplantado la identidad del Ministro en funciones. Tras unas palabras en las que apoyaba la revolución de los Seres y alababa a sus discípulos, salió de la sala incendiándola con fuego maldito.

Tras huir de la Cumbre exitosamente, Bryan se reunió con sus nuevos discípulos, congregados por Cabellos de Plata y gracias a quien consiguieron traerle de nuevo a la vida. Juntos, causaron conmoción por Charing Cross hiriendo de gravedad a todo el que se cruzase en su camino.

El trasgo Klyon volvía a hacer presencia en Trafalgar tras los últimos acontecimientos de la Cumbre Extraordinario. Valiéndose de su simpatía pasó por San Mungo para buscar a Oxlade Kingston y reprimirle por perder el reloj que el en su día trató de romper, pero no lo encontró. Algo deprimido se dirigió de nuevo a Trafalgar donde se encontró a dos pequeños niños charlando sentados.

Uno de ellos era la pequeña Patty Peakes, hija de Iara Peakes Yaxley, la jefa del departamento de RyCCM. Este, traicionando la confianza de su amo Mergak, avisó a la niña de que pronto tratarían de acabar con su madre y le otorgó un pañuelo embrujado con el que de encontrarse en peligro, la familia Peakes podría avisar al trasgo. Grande fue su sorpresa cuando al llegar a la sede el malvado Mergak le castigó por lo ocurrido, amenazándole le obligó a ser el mismo quien se llevase a Iara con la ayuda de algunos discípulos de Bryan.

Tembloroso, triste y llorando como un bebé, Klyon fue junto con Tigre y Germanotta a por ella. La encontraron en la plaza de Londres rodeada por hijos y amigos, entre ellos aurores como Remus Lupin. Klyon andó con los discípulos detrás y estableció una conversación con Iara, a pesar de los avisos de precaución de los que estaban en la zona.

Tratando de que nadie resultase herido, Klyon rogó calma y tras avisar a Iara de que de no venir, toda su familia, incluidos sus pequeños James y Patty, serían cruelmente asesinados por Mergak. La jefa de departamento se preocupó por ellos y decidió marcharse con el trasgo a quien le hizo jurar que su familia no correría peligro. Tras varios intentos de detenerlos por parte tanto de los niños como de algún auror, se aferró a la mano de Klyon, quien agarró a los discípulos y se desaparecieron de allí... Tal vez esta sea la última vez que la comunidad mágica haya visto con vida a Iara Peakes.